Al presentar alteraciones en la glándula tiroides se pueden presentar, entre los síntomas, pérdida de cabello. Es importante establecer si la hormona se encuentra controlada o no, si se está tomando medicamento, si hay otros síntomas relacionados con la caída del pelo. Lo más recomendado es que se consulte al médico tratante para que se puedan solicitar las pruebas, reajustar el medicamento o tomar las medidas necesarias para evitar la pérdida. Recordar mantener una dieta balanceada, aumentar el consumo de frutas, evitar los tintes en el cabello o el uso de tratamientos de keratina.