Se podría usar una mamila, un chupo entretenedor (los pediatras no son muy dados a apoyar el uso de mamilas y los odontólogos tampoco porque pueden deformar los dientes) con el fin de que el bebé tenga la sensación de tener algo en la boca y succionarlo. Muchas veces no quieren el pezón o el seno como tal, sino la sensación de succión.