Un bebé deshidratado se muestra muy irritable, llora para que le den líquidos y cuando se le administra la recibe con mucho deseo, se puede ver sus labios secos, llorar sin lagrimas, su piel se torna seca y poco turgente, la fontanela o mollera se puede percibir hundida en la cabecita y la lengua se puede percibir seca, asi como los carrillos ( cara interna de las mejillas dentro de la boca ).