No hay evidencia concluyente que relacione la alimentación y el acné, en ese sentido no existe una dieta recomendada para manejarlo o prevenirlo. Dentro de los alimentos que los pacientes asocian al aumento de lesiones se encuentran: lácteos, comidas grasas, dulces. Si percibe cambios asociados a alguno de ellos, la recomendación es evitarlo.