En teoría se cree que al soportar frío se debería producir mayor calor para evitar que el cuerpo baje su temperatura hasta niveles peligrosos, por ende debería consumir mayor cantidad de energía. Sin embargo está determinado que al exponer las células al frío estas tienden a disminuir su metabolismo basal, por lo tanto no consumen mucha energía y por el contrario se podría causar daños a la salud (hipotermia).