Los recién nacidos para adaptarse a la vida fuera del útero realizan de manera fisiológica diferentes formas de respiración: primero su respiración es muy acelerada y rápida, segundo mientras duermen hacen unas pequeñas pausas respiratorias pero estas no demoran mucho tiempo (el bebé no debe realizar ningún cambio de color de su piel), luego continúa su respiración rápida. A medida que él crezca se va observando cómo cambia su manera de respirar. Recomendación: si observa que su hijo se torna de color morado o muy pálido. debe llevarlo a urgencias o si nota que se le marcan las costillas también llevarlo.