La gastritis se puede acompañar de reflujo gastroesofágico, que es la regurgitación del contenido del estómago hacia el esófago que puede llegar hasta la boca, por la irritación que produce puede generar pirosis ("acidez" o "agrieras") y manifestarse con irritación en la garganta.
Por lo anterior se debe hacer un manejo con medicamentos que disminuyan la secreción de ácido del estómago. Si los síntomas persisten a pesar de un adecuado manejo farmacológico, se debe considerar la remisión a gastroenterología para que se realice una endoscopia de vías digestivas altas para verificar el estado y anomalías de dichas estructuras.