En los primeros días después de la fecundación e implantación del cigoto, se puede producir un pequeño sangrado, pero es leve, que se llama spotting, se produce secundario a los procesos mencionados anteriormente. Si se presenta además picazón, enrojecimiento de la vagina y olor fétido, puede tratarse de una infección vaginal. Lo ideal sería asistir a consulta médica para mejor valoración y solicitar la prueba de embarazo para descartarlo.