Existe algo llamado la higiene del sueño, que son las acciones que debemos llevar a cabo antes de acostarnos y que facilitan conciliar el sueño. Entre ellas están, comer al menos una o dos horas antes de acostarse, ya que si se está lleno, será más difícil conciliar el sueño; tener una rutina, por ejemplo, cepillarse los dientes, lavarse la cara e ir a la cama a la misma hora aproximadamente todos los días; evitar los ruidos y la luz fuerte en la habitación, es decir: La televisión, el computador y el teléfono celular no ayudan a conciliar el sueño, particularmente este último, ya que la luz tan fuerte que produce, es una señal que nuestro cerebro capta como luz de día y evita que nos de sueño. El usos excesivo de redes sociales, computador, o comunicaciones nos hace estar más activos mentalmente y nos quita el sueño. Terminar las actividades a una hora determinada y prepararse para dormir, leer material impreso, no digital, como un libro o una revista de un tema que relaje siempre ayuda.