Los síntomas de una fractura son deformidad en el pie o limitación o anormalidad en los movimientos. Si su pie no duele mucho, no perdió su forma y puede moverse normalmente es poco probable que se haya fracturado, por lo cual no necesitaría consultar al médico. Si llega a presentar alguno de estos síntomas, no dude en asistir presencialmente a su EPS.