Remover tejido o manipular de forma brusca la piel sin el entrenamiento o los medios correctos es desaconsejable. Si el sangrado ya se detuvo es probable que la cicatriz pueda no ser muy estética, así mismo se pueden dañar nervios superficiales en el proceso.
Por el momento protéjase del sol, mantenga aseo de la herida sin maltratarla nuevamente y esté atento a signos de infección como supuración y mayor dolor.