El Dimenhidrinato de clasifica dentro de la categoría B de riesgo en el embarazo. Aunque no existen estudios bien controlados que aseguren su inocuidad, muchos estudios han puesto de manifiesto que la administración de este medicamento durante el embarazo para tratar las náuseas y vómitos, no ha estado asociada a un riesgo de anormalidades fetales.
Por lo tanto, el riesgo de la utilización de este fármaco durante el embarazo parece ser pequeño.