Más que el tipo de auricular usado (aunque influye) lo más importante a tener en cuenta es la intensidad del sonido y el tiempo de exposición. Entre más alto escuche y por más tiempo lo haga de ese modo más daño le hace al oído.
La voz humana en una conversación normal está en el rango de los 50 decibeles, la música entonces debe tratar de escucharse a menos de esos decibeles o máximo a 50. Debe ser capaz de escuchar con claridad que alguien le hable aún con los auriculares puestos.