Durante el embarazo se pueden presentar dolores en la región pélvica, lumbar, por el crecimiento del útero y la distensión de los ligamentos. Realice cambios de posición, siéntese en una silla cómoda con la espalda recta, evite estar mucho tiempo de pie. Si el dolor continua, persiste o aumenta, si presenta sangrado vaginal consulte a su médico de inmediato.