Debe tener una dieta saludable, evitar el consumo de grasas, alcohol, cigarrillo, decirle no al sedentarismo, realizar actividad física mínimo 150 minutos a la semana, llevar un control estricto del peso y de las cifras tensionales. Una alimentación saludable forma parte importante de un estilo de vida saludable para el corazón.
La alimentación saludable contiene variedad de frutas, verduras y cereales integrales, carnes magras, pollo, pescado, fríjoles, leche descremada o semidescremada y productos lácteos descremados o semidescremados. Además contiene cantidades bajas de grasas saturadas, grasas trans, colesterol, sodio (sal) y azúcar añadida.