Es necesario que lave con abundante agua y jabón el pene, retrayendo completamente el prepucio y eliminando todas las secreciones que pueda tener. Recuerde tener un aseo adecuado después de cada relación sexual, lo más pronto posible.
Inicialmente no requiere ningún tipo de medicamento. Si a pesar de seguir las recomendaciones dadas continúa con los síntomas debe acudir de forma presencial a una consulta para poder hacer un diagnóstico y dar tratamiento. Recuerde que por este medio no es posible dar tratamiento ni receta médica, ya que es una orientación que no reemplaza una consulta presencial.