Al tener dolor y diarrea es normal que disminuya el apetito, por lo tanto es importante una dieta estricta astringente, la cual consiste en evitar lácteos, grasas, dulces, refrescos, aumentar el consumo de sopas o caldos, sin grasas y si la diarrea es abundante o no se está comiendo adecuadamente, es recomendable que se inicie suero oral. Si los síntomas persisten por más de 8 días, consultar al médico tratante.