La eyaculación precoz y los problemas de erección en hombres jóvenes en su gran mayoría son provocados por factores psicológicos como ansiedad, estrés laboral, emocional, académico, económico, experiencias previas desagradables, problemas de pareja, entre otros. Realizar una introspección para determinar cuál de esos factores puede estar afectando su vida en pareja es esencial para evitar la disfunción y la eyaculación precoz. Algunos ejercicios de piso pélvico pueden ayudar, estos se realizan simulando la contracción que se hace cuando se interrumpe la micción de forma voluntaria, estos ejercicios se realizan en 3-5 series de 15 repeticiones, cada contracción entre 3 a 4 segundos y otras lo más rápido que pueda. La comunicación en pareja es fundamental para superar esos inconvenientes, debido a que ayuda a romper el circulo negativo de ansiedad y culpa por eyacular antes de lo deseado, o una erección no adecuada. Si a pesar de hacer todo lo anterior y corregir las posibles causas sigue presentando problemas, es recomendable acudir a un especialista.