La hipertensión arterial es una enfermedad de tipo crónico que puede afectar la visión dañando la retina, por eso siempre es importante que un hipertenso durante su seguimiento periódico, sea valorado por lo menos una vez al año por un oftalmólogo y especialmente si su problema de hipertensión es de difícil control o de diagnóstico tardío, también si tiene otras enfermedades secundarias en su estado de salud general como la diabetes por ejemplo que también afecta la retina y la visión.