El punto G del hombre se encuentra ubicado en la próstata y existen dos formas de estimularla.
La primera, que es la indirecta, puede producir un orgasmo más placentero y se logra masajeando y presionando suavemente con el dedo índice el perineo (área que se encuentra entre los testículos y el ano), con lo que estarás estimulando el punto G desde afuera.
La segunda forma, la directa, es mucho más difícil que ellos acepten que la estimulen, debido a que se encuentra en el interior del ano y se requiere la introducción de algún elemento estimulante a través de este.