Sólo 50% de los pacientes experimenta somnolencia transitoria durante los primeros días del tratamiento, seguida de sedación y ataxia, especialmente en ancianos. Con frecuencia se presentan mareos, dolor de cabeza, confusión, depresión, alteraciones del habla, cambios en la líbido, temblor, incontinencia y retención urinarias, náuseas, vómito, diarrea, sequedad de boca y dolor epigástrico. Ocasionalmente existe: Hepatitis, Ictericia, Dermatitis, Urticaria, prurito, Leucopenia, Agranulocitosis, Anemia, Trombocitopenia, Eosinofilia, alteraciones del comportamiento, Amnesia, Psicosis, Diplopía, alteraciones de la visión, Nistagmo, alteraciones de la audición, hipersalivación e hipersecreción bronquial. Recordar que son manifestaciones que se han reportado pero no por esto significa que se presenten en el 100% de los casos.