Lo primero es que no debes sentir pena de tener este trastorno, sólo de no hacer nada por mejorarlo. Uno de cada tres hombres lo sufren y pocos se hacen un tratamiento. Antes de iniciar cualquier tipo de tratamiento es importante evaluar sus expectativas, es de igual manera importante diagnosticar y tratar las patologías que puedan estar asociadas tales como la disfunción eréctil (ED) y/o procesos inflamatorios o infecciosos de las vías urinarias. El tratamiento suele requerir terapia farmacológica y terapia psicosexual.