Bueno, su esposa tiene razón en molestarse aunque debe explicarle usted que no es su voluntad para que así ella pueda comprenderlo. Es un problema bastante común y son varias las razones que se dan para ello: puede ser consecuencia de infecciones urogenitales de la uretra posterior y de la próstata, así como de alteraciones de tipo neurológico, alteraciones vasculares, medicamentos que esté tomando, alteraciones en sus hormonas. Otras pueden ser situaciones ambientales o personales como stress, ruidos, temor a ser descubiertos por los hijos [por ejemplo], inseguridad, falta de comunicación entre la pareja, etc. Luego es importante establecer la cusa para poder ser ayudado. El Médico Urólogo le puede apoyar en este caso y puede ir con su esposa a la consulta.