Es importante que se consulte al médico tratante para poder realizar una historia clínica completa, revisar a fondo los síntomas, hábitos, otros exámenes que hayan realizado, entre otras variables que no pueden resolverse por este medio. Recordar que durante el embarazo se producen múltiples cambios hormonales, entre ellos, en la hormona de la tiroides la cual se puede elevar o disminuir y según esto, producir síntomas. Si se descubre que hay alteraciones en la hormona tiroidea, se debe iniciar manejo para evitar complicaciones tanto maternas como neonatales.