El Valsartán se usa sólo o en combinación con otros medicamentos para tratar la presión arterial alta. También para tratar la insuficiencia cardíaca (afección en la que el corazón no puede bombear suficiente sangre al resto del cuerpo) y para mejorar la supervivencia después de un ataque cardíaco. El Valsartán pertenece a una clase de medicamentos llamados antagonistas del receptor de la angiotensina II. Actúa bloqueando la acción de determinadas sustancias naturales que contraen los vasos sanguíneos, lo que permite que la sangre circule mejor y que el corazón bombee con mayor eficiencia.