Los neonatos en sus primeras semanas de vida o los lactantes, tienen la denominada primera sonrisa, que es un reflejo del lactante ocasionando un movimiento de los labios generando la sonrisa, esta no responde a algún control y es desencadenada automáticamente. Posteriormente cuando crecen ya fijan la mirada y sonríen directamente ante estímulos y con ver un rostro conocido.