El herpes no tiene un tratamiento definitivo, pero puedes controlarla con medicamentos antivirales. Es poco probable el contagio después de resolver las lesiones y recibir un tratamiento adecuado. Sin embargo la enfermedad puede reaparecer en condiciones de enfermedad, estrés o malnutrición.
Aún así debes consultar a tú médico para una adecuada valoración.