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Recuerda que durante el embarazo existen modificaciones fisiológicas en el organismo que se generan para adaptarse a la nueva circunstancia que es la presencia de un ser vivo en el interior del útero. Dentro de estas modificaciones se encuentran el aumento de peso (entre 11.5 y 16 kg de peso durante el transcurso de todo el embarazo) así como la distensión (estiramiento) de los tejidos abdominales, incluidos músculos, fascina muscular y piel, que son los elementos que dan tensión al abdomen, esto debido al aumento de volumen del mismo; de modo que tu cuerpo cambia durante el embarazo, y muchos de estos cambios persisten después del parto o cesárea.
Esto no significa que estos cambios sean irreversibles; existen ciertos elementos que te pueden ayudar a recuperar tu figura y aumentar la tonicidad de la región abdominal. Dentro de ellos se encuentra la realización de una dieta baja en grasas, en especial las grasas saturadas, baja en carbohidratos refinados y con un aumento en la ingesta calórica proveniente de alimentos ricos en proteínas. Esto sin embargo debe ir de la mano con la realización de actividad física diaria, preferiblemente aerobica (150 minutos a la semana según la OMS) que ayude a quemar el exceso de grasa, así como también ejercicios que trabajen directamente la parte abdominal, los cuales te recomiendo realizar guiada por un instructor especializado o deportologo.
Para que estas estrategias den resultados es necesario que se realicen de manera constante; Sin embargo, a pesar de esto muchas veces los resultados no son los deseados y es necesaria la realización de intervenciones quirúrgicas con fines estéticos como la abdominoplastia, específicamente la dermolipectomia, la cual está destinada a acabar con la piel y la grasa sobrantes del cuerpo y se realiza bajo anestesia general y practicada por un cirujano plástico entrenado en dicho procedimiento. Espero haberte ayudado con la respuesta.