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Si esta descrito que puede llegar a presentarse hipotensión al suspender la medicación antidepresiva, sin embargo es muy infrecuente. La suspensión abrupta de un fármaco antidepresivo puede originar lo que se conoce como síndrome de discontinuación de antidepresivos ISRS (inhibidores selectivos de la recaptacion de serotonina). Este se presenta posterior a la interrupción abrupta o a la reducción de la dosis de este tipo de medicamentos y puede originar toda una gama de síntomas dentro de los que se pueden incluir: vértigo, dificultad respiratoria, temblores, ansiedad, inquietud, depresión, irritabilidad, agresividad, cambios de humor repentinos, desrealización, despersonalización, síntomas psicóticos y trastornos del sueño.
También se describen síntomas gastrointestinales y cardiovasculares; dentro de estos últimos se describe la taquicardia, palpitaciones y la presencia de hiper o hipotension, siendo la hipotension mucho menos frecuente.
Recuerda que para evitar todo este tipo de efectos adversos se recomienda reducir de manera gradual la dosis durante varias semanas o meses. Si bien la reducción lenta de la dosis no garantiza que el paciente no vaya a experimentar reacciones adversas, se considera un método más seguro que la interrupción abrupta. Si la hipotension es persistente te recomiendo acudir a consulta con tu medico para el ajuste del esquema terapéutico. En caso de que llegues a presentar mareos, sincope (desmayo), visión borrosa, fatiga o falta de concentración te recomiendo acudir al servicio de urgencias mas cercano.