No es recomendable suspender abruptamente los antidepresivos.
Los síntomas que se asocian a la suspensión van desde malestar abdominal como náusea, vómito, dolor abdominal, diarrea, mareo (como lo que menciona), debilidad, dolor muscular, dolor de cabeza, insomnio, temblor, inquietud, taquicardia, entre otros.
Recomiendo que asista a su médico para indique las dosis específicas en que debe ir suspendiendo el medicamento.