Los métodos anticonceptivos de emergencia deben ser utilizados en momentos indicados y no de manera rutinaria para evitar complicaciones. Este método puede adelantar o atrasar el periodo más o menos de 10 a 15 días, aumentando el dolor abdominal y el sangrado. El cuerpo hormonalmente se va regularizando hasta que esto lo controla. Si persisten los síntomas o el sangrado no cesa, se debe consultar al médico para dar un tratamiento dirigido.