La mayoría de las personas que tienen la infección por Clamidia no presentan síntomas. Si se presentan síntomas, es posible que no aparezcan por varias semanas después de que se hayan tenido relaciones sexuales con una persona infectada. Incluso cuando no causa síntomas, la infección por Clamidia puede dañar el aparato reproductor. Las mujeres pueden presentar secreción vaginal anormal, sensación de ardor al orinar. También pueden infectarse por Clamidia en el recto, ya sea mediante las relaciones sexuales anales receptivas o la propagación desde otra parte infectada (como la vagina). Aunque por lo general estas infecciones no causan síntomas, pueden provocar dolor en el recto, secreciones y sangrado.