El agua oxigenada (Peróxido de Hidrógeno) es una solución que se utiliza como antiséptico (limpia y desinfecta tejidos blandos o superficies contaminadas); no se recomienda para el lavado ótico (oídos). Si se presenta tapón de cerumen en los oídos se deberá aplicarse glicerina y posteriormente realizar un lavado. Se debe consultar al médico.