No es recomendable que introduzcas nada en tu oído. Pues en el intento puede que quede líquido y este ingrese a estructuras más profundas del canal auditivo y promueva, ahora si, una infección y complique el cuadro. Debes estar atento y tomar analgésicos para el control del dolor. Si el dolor se torna insoportable, lo ideal es que vayas a un médico u otorrinolaringólogo que te miren por medio de un otoscopio las estructuras del oído y te haga él mismo la limpieza o te indique si debes sumar a la terapia algún antibiótico.