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Tranquilo, se le dio adecuado manejo a el contacto con agua contaminada, por lo que lo único que queda por hacer es estar pendiente que la herida no se ponga roja, caliente, con dolor o secreción. No se requiere la aplicación de ningún medicamento adicional con el fin de evitar una infección, dado que el lavado con agua y jabón se encarga de eliminar la mayoría de virus, bacterias y parásitos que se pueden contagiar, fuera del contexto hospitalario. Por eso es recomendable el aseo de manos y el aseo de las heridas diariamente, con el fin de evitar infecciones, principalmente por las bacterias que habitan normalmente en la piel.