Las ojeras son secundarias a congestión de los capilares situados debajo de la fina piel del rostro, especialmente, en la porción inferior del ojo, por problemas de pigmentación, estrés, el descanso insuficiente o la retención de líquidos, lo cual se resuelve mediante un adecuado sueño nocturno, la realización de actividad física y una dieta adecuada