Por lo general la recomendación es a partir de los 25 años iniciar con los exámenes de perfil lipídico (colesterol, triglicéridos), y dependiendo de los resultados se indica tratamiento con dieta o medicamentos o se indica una nueva prueba cada 5 años. A partir de los 40 años está indicado el inicio de pruebas para evaluar la presencia de diabetes (se inicia con cualquiera de las siguientes 3 pruebas: glucosa en ayuno, Hemoglobina glicosilada, glucosa post-carga de 75 gramos), de nuevo depende del resultado la repetición de una prueba para comprobar el diagnóstico e iniciar tratamiento. Siempre se debe evaluar la presión arterial. Por lo general los demás exámenes se orientan de acuerdo al riesgo que se tenga para cada enfermedad y de padecer cáncer (se tiene en cuenta su historia familiar, historia de consumo de cigarrillo y alcohol y otras exposiciones que lo pueden poner en riesgo de otras enfermedades), por lo que de ahí depende si se indique la realización de prueba de esfuerzo (para enfermedad coronaria), antígeno prostático asociado a un tacto rectal y test de guayaco (sangre oculta en heces), que son las pruebas que por lo general cubren el tamizaje o búsqueda temprana de las enfermedades de los adultos.