Al interrumpir el uso de las pastillas anticonceptivas, es normal que puedan ocurrir alteraciones menstruales como retrasos, sangrados en días no esperados, por lo cual no se debe asustar debido a que es normal. Sin embargo si ha tenido relaciones sexuales sin protección en días de alto riesgo, es recomendable que si el retraso alcanza los 10 días, realizar una prueba de embarazo.