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La mayoría de las enfermedades se puede diagnosticar en base a los factores de riesgo que tienen los pacientes, los síntomas que refieren más la exploración física y si se es necesario laboratorios. En el caso de la psoriasis es muy importante el saber si se tienen familiares con la enfermedad. En la psoriasis hay un acumulo de células que se están reproduciendo rápidamente generando una elevación de la piel de color rojizo con escamas de piel muerta blancas o plateadas en la orilla de la lesión o en la más prominente. Otros síntomas relacionados es la aparición de pequeños puntos blancos de descamación, piel seca y agrietada que puede sangrar, dolor, ardor o comezón en el sitio de lesión, dolor en las articulaciones con inflamación o rigidez. Sin embargo puede haber enfermedades que se parezcan, por eso se recomienda la revisión presencial por un médico que puede referirlo a un dermatólogo.