En ocasiones la rigidez disminuye por ausencia del estímulo adecuado, otras veces es por cansancio o estrés. Es importante que al tener el miembro erecto siempre lo estimule, además de controlar el estrés, la ansiedad, tener un adecuado patrón de sueño. Si con esto no mejora y la erección sigue perdiéndose rápidamente, es recomendable que sea valorado por el médico tratante.