El aceite de coco por sus altos contenidos nutricionales, ácidos grasos ha sido utilizado para combatir infecciones, prevenir enfermedades, proteger el sistema inmunológico y para pérdida de peso. Sin embargo sus beneficios no han sido comprobados científicamente por estudios, por lo cual debe mantener una dieta balanceada disminuyendo la ingesta de los carbohidratos y grasas y acompañada de actividad física diaria 30 minutos.