La disfagia como comentas al momento de tragar los alimentos de la boca a la garganta y de la garganta al esófago, y al haber dificultades, puede ser un problema a largo plazo, teniendo como causas importantes:
- Trastornos neurológicos. Como la esclerosis múltiple, la distrofia muscular y la enfermedad de Parkinson, pueden provocar disfagia.
- Daño neurológico. Como el que se produce por un accidente cerebrovascular o por una lesión en el cerebro o la médula espinal, puede afectar la capacidad para tragar.
- Divertículo faringoesofágico. Es un pequeño reservorio que se forma y acumula partículas de alimentos en la garganta, con frecuencia justo arriba del esófago, y provoca dificultad para tragar, sonidos de gorjeo, mal aliento y tos o carraspeo reiterado.
- Enfermedad por reflujo gastroesofágico. Las lesiones a los tejidos esofágicos provocadas por el ácido estomacal que retrocede hacia el esófago pueden causar un espasmo o cicatrices, así como el estrechamiento de la parte inferior del esófago.
- Cáncer. Ciertos tipos de cáncer y algunos tratamientos oncológicos, como la radioterapia, pueden ocasionar dificultad para tragar.
En fin, existen muchas otras causas que pueden provocar esto, y tienen que ser descartada con estudios pertinentes.
Al descartar alguna alteración neurológica se puede pensar en alguna alteración psiquiátrica, principalmente la ansiedad, la cual está disfagia tendría que estar acompañada de síntomas como:
- Sensación de nerviosismo, agitación o tensión.
- Sensación de peligro inminente, pánico o catástrofe.
- Aumento del ritmo cardíaco.
- Respiración acelerada.
- Sudoración.
- Temblores.
- Sensación de debilidad o cansancio
- Problemas para concentrarse o para pensar en otra cosa que no sea la preocupación actual.
- Tener problemas para conciliar el sueño.
- Padecer problemas gastrointestinales.
- Tener dificultades para controlar las preocupaciones.
- Tener la necesidad de evitar las situaciones que generan ansiedad.
Para esto mientras es necesario que vigiles si existen otros síntomas importantes además de la disfagia, realizar ejercicios de respiración profunda, yoga o Tai-Chi para control del estrés, así como:
- Cambiar los hábitos alimentarios. Intenta comer porciones más pequeñas y con más frecuencia. Asegúrate de cortar los alimentos en trozos más pequeños, de masticar bien por lo menos más de 30 veces y de comer de manera más lenta.
- Probar alimentos con diferentes texturas para detectar si alguna provoca más problemas. Los líquidos ligeros, como el café y el jugo, son un problema para algunas personas, y los alimentos pegajosos, como la mantequilla de maní o el caramelo, pueden hacer que resulte difícil tragar. Evita los alimentos que te provoquen problemas.
- Evitar el alcohol, el tabaco y la cafeína. Es posible que empeoren la acidez estomacal.
Espero haberte orientado, estamos a tus órdenes.