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En caso de que llegues a presentar dolor intenso de la articulación, enrojecimiento o calor del tobillo, inflamación marcada, fiebre, limitación marcada para la movilidad, sensación de adormecimiento o parálisis de la pierna, debes consultar de forma prioritaria ya que éstos pueden ser signos de alarma.
Para poder establecer una causa específica de los síntomas, se requiere de una valoración médica completa en la cuál se incluya examen físico e historia clínica, incluso pueden requerirse estudios diagnósticos adicionales cómo radiografías y laboratorios.
Existen medicamentos de venta libre que se usan para el manejo de dolor e inflamación cómo el naproxeno y que pueden ayudarte a disminuir los síntomas, además te recomiendo mantener reposo de la extremidad, evitar movimientos repetitivos o bruscos, no cargar cosas pesadas y tratar de usar zapatos cómodos.
Si el dolor no mejora o se empeora, debes consultar para que un profesional pueda revisarte y establecer un tratamiento adecuado, ya que cómo no te golpeaste, deben estudiarse otras causas, podría tratarse de cuadros inflamatorios por desgaste, infección, entre otros y según sea la causa vas a requerir un tratamiento específico.
Espero haber podido ayudarte y orientarte.