No pasa nada. Sin embargo, debes revisar como se realizan este tipo de prácticas, qué se asocia a esta práctica y en que momentos se realizan. Lo que pueden llegar a no ser sano es el excesivo consumo de pornografía o adicción a la pornografía y acompañado a la mala interpretación del contenido pornográfico. Por otra parte, también es importante que el exceso no interfiera con su vida diaria normal y en el desarrollo normal de actividades académicas, laborales, sociales, deportivas, recreativas, etc.