El color de la orina es muy particular y puede variar mucho por diferentes causas pero principalmente por el estado de hidratación de la persona. Lo importante en su caso es que no tenga síntomas que sugieran infección urinaria, tales como ardor, aumento en la frecuencia, sensación que no evacua completamente, dolor al orinar o inclusive sangre en la orina, en cuyo caso debe consultar a su ginecólogo inmediatamente. De otra parte si el color es normal pero varía en que a veces es más clara y a veces más oscura o concentrada, esto depende realmente es de la cantidad de líquidos que usted ingiera y su estado de hidratación, si consume pocos líquidos y está en un clima muy caluroso, la orina saldrá más concentrada y por el contrario si consume muchos líquidos (agua, gaseosa, jugos, etc.) esto favorece a que la orina sea más clara. Existen otras enfermedades no muy frecuentes que alteran el color de la orina y esta cambia a un color francamente anormal, en cuyo caso también se debe consultar para aclarar el diagnóstico.