El procedimiento es similar a un TAC, lo que cambia es el equipo usado pero en apariencia un tomógrafo y un resonante son muy parecidos y la forma de hacer el examen es igual. El paciente se acuesta en la camilla del equipo y se introduce en él (el equipo es una esfera), el paciente entra en medio del equipo acostado). Por lo general tiene las mismas contraindicaciones del TAC, incluyendo a diferencia de este último que los elementos magnéticos no deben entrar en el equipo puesto que actúa como un imán. Consideración especial se debe tener en caso de uso de marcapasos y otro tipo de elementos metálicos.