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El tomar agua es una práctica completamente sana y recomendada.
Pero los expertos en ello recomiendan que con los alimentos el agua se debe evitar desde 30 minutos antes y hasta mínimo 1 hora luego de consumirlos.
La explicación que dan es porque si se toma hasta 30 minutos antes termina diluyendo la saliva junto a las enzimas digestivas, aumentando así la probabilidad de mala digestión y si se toma durante los alimentos o en menos de 1 hora de haberlos consumido, también podría diluir los jugos gástricos encargados de eliminar las posibles bacterias presentes en los alimentos.
Espero haberla orientado, si tiene otra inquietud, no dude en consultarnos.