Inicialmente esto no es signo de enfermedad venosa ni arterial, simplemente de sobrecarga muscular. Es recomendable que relaje sus pies al final de la jornada con baños de agua caliente, estiramientos, uso de una bola o botella y hacerla rodar con la planta del pie. Puede empezar a usar medias de compresión media hasta la rodilla para evitar la aparición de várices en un futuro.