La principal causa es la hipertrofia de adenoides, una estructura localizada en la unión de la nariz con la boca a nivel retro de la boca, cuya función es proteger de las infecciones. Ellas pueden aumentar de tamaño por alergias, reflujo, deformidades del paladar, principalmente en personas que chuparon dedo, etc. La cura definitiva es operarlas. Entre otras causas tenemos la pérdida del tono muscular en los ancianos que permite que el velo del paladar produzca alteraciones al flujo del aire, así como la mala posición de la cabeza por almohadas de tamaño inadecuado para esa persona. Existen muchas otras razones que ya es preciso estudiar específicamente en cada caso, pues del diagnóstico depende el manejo.