La Esclerosis Múltiple es un padecimiento de tipo neurodegenerativo, crónico mediado por mecanismos inflamatorios autoinmunes. Caracterizada por la triada de inflamación, desmielinización (destrucción de la capa protectora de las células nerviosas) y gliosis (daño de las células de sostén del sistema nervioso).
No está descrita una causa específica que la ocasione, sin embargo, se manejan tres hipótesis:
- Existencia de una infección viral persistente.
- Presencia de un proceso autoinmunitario con pérdida de la tolerancia hacia antígenos de la mielina. Es decir que el cuerpo se ataca a él mismo.
- Presencia de un fenómeno de mimetismo molecular entre antígenos virales y proteínas de la mielina. Esto se refiere a que algunos virus tienen componente que se asemejan a los de las células del cuerpo, haciendo que las células de defensa se confundan y ataquen al tejido nervioso.
Los síntomas clásicos incluyen:
- Hipoestesia (disminución de la percepción táctil).
- Diplopía (visión doble).
- Vértigo.
- Estreñimiento.
- Neuralgia del trigémino (nervio que se encuentra a nivel de la cara).
- Incontinencia urinaria.
- Poliuria (aumento en la producción de orina).
- Ausencia de reflejos cutáneos.
- Espasticidad (tensión y rigidez de los músculos).
- Hiperreflexia (aumento en los reflejos).
- Disartria (dificultad para articular sonidos y/o palabras).
- Nistagmo (movimiento involuntario de los ojos).
- Temblor de Acción.
- Signo de Uhthoff (empeoramiento de los síntomas de esclerosis múltiple por aumento de la temperatura corporal).
- Mioquimias (temblores involuntarios de las fibras musculares).
Si presentas algunos de los síntomas mencionados o van apareciendo de forma gradual, debes acudir a una valoración médica.
Espero haber aclarado tu duda, ante cualquier nueva inquietud, estaremos atentos. No olvides calificarnos.